Jueves 20 de diciembre de 2018
Ciudad de México
José Alfredo Otero / @jaoterom
ADN Magallanero / @ADNMagallanero
Se dice que el martes 13 es de mala suerte, y también que manager nuevo victoria segura, pero Luis Dorante, demostró que no cree en eso y con récord de 22-9 (que suma 31, 13 al revés), desde el martes 13 de noviembre de 2018, no sólo sacó a flote a los Navegantes del Magallanes, en la campaña 2018-2019, cuando había viento, marea y tempestad en la travesía, sino que los tripuló a ser los primeros clasificados, que ni el aficionado, fanático y /o seguidor más optimista de los turcos lo hubiese imaginado en ese momento y menos estando en el primer lugar.
Desde que Dorante, fue nombrado como coach de tercera base de los eléctricos más de uno imaginó y supuso a Luis como salvavidas de Omar Malavé, incluso apostaron por él de una vez y no se equivocaron.
Recuerdo a Dorante como catcher de los Tiburones de la Guaira, que se retiró jóven y como manager de Pastora, en especial lazándonos ese salvavidas en el round robin de la temporada 2000-2001, que agarró y no soltó Phil Regan, hasta la final de esa zafra.
Dorante, conocido como un manager agresivo y de carácter, y desde el 13 lo demostró con el navegante, también dicen que los manager pierden los juegos y los peloteros ganan los juegos, pero como dijo Ramón García en una entrevista los que ganan y pierden los partidos son los peloteros porque son los encargados de ejecutar o no lo que manda el manager, como hoy para terrenear a los Tigres de Aragua, 5-4 y clasificar, como también lo hicieron precisamente jugando para Dorante desde el 13 de noviembre.
Desde ese marte 13 de buena suerte se prendió la artillería cuando se volvió a calentar y encender el Demonio Joven Delmon Young, quien estuvo a punto de irse a su infierno, menos mal que no. También arranacaron los relevos magistrales de Jean Granado.
Se produjo el arribo a los bucaneros de Reynaldo Rodríguez, quien si mal no recuerdo ni equivoco llegó al Universitario, ese mismo 13 de noviembre. Vino la barrida en el José Bernardo Pérez, el astillero magallanero a Caribes Anzoátegui, que dicho por el propio Granado marcó un antes y después en la campaña filibustera.
Mejoró el picheo abridor, la defensa, se mantuvo el relevo y eso se vio en el score de los juegos y en la tabla de clasificación hasta ahora. Mejoró el manejo de los abridores, de la banca y el mando de jugadas y eso también influyó.
También hubo hallazgos como el de Anthony Vizcaya, quien con el relevo en el Puerto la Cruz, es catalogado como un salvavidas por Dorante, y ojo con él enero. Vino la justicia para Wilfredo Boscán a nivel de victorias, justo desde una entrevista previa que se le hizo.
De seguro se me escapan detalles y nombres, pero escribo desde que Dorante, tomó el timón, también hay que reconocer a Roberto Ferrari, su gestión desde antes del inicio de la temporada y durante la misma y la venida de Adonis García, a estas alturas de la zafra lo certifica, y de seguro sigue ingeniando para lo que queda de diciembre y en enero que es cuando más vale.
Creo en eso que dice Dámaso Blanco, prefiero ser más sortario que bueno, también en los números y si Dorante, asumió el 13 y en Caracas de donde son los Navegantes del Magallanes, quizás es porque será el encargado de tripular a los marinos a su campeonato 13 en la LVBP, el número uno (1) para él y por qué no el tres (3) para los piratas en el Caribe, que si unen esos números también formarían el 13, ahí se las dejo.
Además, el antecedente más cercano que recuerdo de haber clasificado a la postemporada en estas fechas fue el 21 de diciembre de 2013, en la campaña 2013-2014, con el 13 marcado ahí de nuevo y ya saben la historia.
Foto: AVS Photo Report / LVBP.