Miércoles 01 de noviembre de 2017
Ciudad de México
José Alfredo Otero
ADN Magallanero
Siempre he escuchado en el argot cinematográfico que las segundas partes nunca fueron buenas y tratando de recordar las películas de béisbol, con una continuación si mal no recuerdo ni me equivoco, por lo menos de las que he visto Grandes Ligas I y II y más recientemente Papita, Maní y Tostón. El segundo film de los Indios de Cleveland, no fue tan bueno, como el primero, como me lo certificó mi pana de crianza Carlos Enrique Weffe, con quien lo vi en el antiguo cine Acacia (hoy Traki, como también me recordó Carlos) en Plaza Venezuela, a un costado de la entrada del boulevard de Sabana Grande, camino, dirección y sentido hacia el Universitario. Como olvidar a Wesley Snipes, como primer bate, veloz y jardinero central, igual a Pedro Cerrano, como el bateador de poder, con sus cábalas y voodo, para batera y que escribir de Charlie Sheen, como cerrador Ricky Vaughn y su apodo de cosa loca. Más el veterano Tom Berenguer y el tercera base, novio de la madrina.
De la película venezolana, con el título de la famosa frase de José Pepe Delgado Rivero, quien no se acuerda de la bella Juliette Pardau, toda una magallanera literalmente de película, como Julissa, así se vista del eterno rival, aunque tengo que ver la dos.
Todo este preámbulo lo hago por la segunda participación de Jerome Williams, con los Navegantes del Magallanes, esta vez en la campaña 2017-2018, después su sacada de tarea en la 2011-2012, con récord de 5-0. Si bien casi seis años han pasado desde entonces, el pitcher dejó grata impresión con los turcos, considero que el pitcher, viene a completar lo que dejó pendiente en aquella zafra, ojalá pudiese tener un almanaque de resultados deportivos, como el que compró Marty McFly Jr. (Michael J. Fox), en Volver al Futuro II, continuando en la onda cinematográfica y revisar como le iría al abridor, con los eléctricos esta temporada, si terminará su faena, incluso quién ganará esta noche el séptimo juego de la Serie Mundial de las Grandes Ligas 2017, si los Astros de Houston, con los cuales se identifican los magallaneros, no solo por José Atuve, sino desde aquel famoso e inolvidable convenio de trabajo entre bucaneros y estadounidense a principio de los años 90 o los Dodgers de los Ángeles, que lo sienten muchos mexicanos, desde una década antes, específicamente la de los 80, por el arribo, éxito y triunfo de Fernando Valenzuela, con los californianos.
Como deja vu de Denzel Washington, Williams, a quien bautizo, como el nuevo negrón, por la analogía entre su apellido y como le decía Humberto Perdomo a Williams Magallanes, regresó, con su guante rosado, en honor a su madre, por el cáncer de mamá, cuyo mes conmemorativo acaba de pasar, pero lo que nunca debería pasar en su prevención, misma que considero deben tener el resto de los equipos, cuando Jerome, se suba a la lomita en su segunda parte, la cual aspiro y espera sea buena o incluso mejor que la primera, entre tanto puedes acompañarme a descubrirlo viendo Jerome II, en cada de una de sus salidas, bien sea en vivo y directo desde tu sala favorita (estadio de turno donde se presente) o siguiéndolo, desde la comodidad de la mejor sala del mundo, la de tu casa, por radio, televisión o internet.
Foto: Navegantes del Magallanes